¿Cómo es posible lograr la autocuración con Reiki en 21 días?

De ello se concluye que el ser humano necesita 21 días para renovar por completo todas las células de su cuerpo, por lo que el periodo de limpieza o autocuración de Reiki es ideal para sacar todo esto a la luz, pero de una forma mucho más limpia y saludable. camino.

¿Cómo hacer la autocuración Reiki en 21 días?

Como ya sabemos, cada vez que un aprendiz recibe la sintonización o sintonización de Reiki (la apertura de canales de energía por parte de un maestro de Reiki que le permite al alumno canalizar la energía universal), tiene la oportunidad de transformarse energéticamente en todos los niveles.

Esta transformación es posible si el aprendiz respeta las 21 días de autocuración con Reiki (ininterrumpidamente) en el que no solo debes realizar una limpieza energética diaria a través del autotratamiento sino también una limpieza del cuerpo u organismo.

En otras palabras, durante 21 días consecutivos, el aprendiz deberá realizar un profundo proceso de limpieza y purificación en el que logrará la armonía de cuerpo, mente y espíritu.

Dicho proceso consta básicamente de dos pasos, el primero es la incorporación de ciertos hábitos que ayudarán en la liberación de toxinas, y el segundo es la realización de un autotratamiento de Reiki que te ayudará a convertirte en un verdadero canal de energía.

1. Hábitos necesarios

Entre los hábitos diarios y saludables que debes incorporar para llevar a cabo el proceso de autocuración se encuentran:

• Consume suficiente agua (8 vasos al día es lo ideal).
• Incorpora a tu dieta diaria el consumo de frutas, verduras y otros alimentos ricos en fibra.
• Reducir el consumo de azúcar.
• Reemplace el café después de las infusiones.

Por otro lado, debes:

• Evitar el consumo de bebidas alcohólicas.
• Elija jugos naturales en lugar de refrescos y bebidas artificiales.
• Evita fumar.
• Evitar o reducir, en la medida de lo posible, el consumo de carnes rojas.
• Evitar el consumo de productos enlatados y/o con conservantes.

2. Autotratamiento Reiki

En cuanto al autotratamiento, se considera una de las partes más importantes de Reiki, porque no se puede esperar que un alumno sane o cure a otros sin aprender primero a curarse a sí mismo.

Sólo quien sea capaz de realizar una verdadera limpieza profunda, eliminando bloqueos o cualquier tipo de mala energía, podrá guiar a los demás para que ellos también lo hagan.

Y lo consigue a través de un autotratamiento de 21 días consecutivos, durante los cuales pone en práctica todos los posiciones de auto reiki, es decir, lo mismo Posturas de Reiki nivel 1.

Si quieres saber exactamente los pasos a seguir para aprender como hacer auto reiki o autotratamiento, puedes encontrar la información en este mismo blog.

Eso sí, teniendo en cuenta que es ideal, pero no obligatorio, realizar los ejercicios de autotratamiento de Reiki por la mañana, para que empieces el día limpiando tu aura y preparando el cuerpo para las actividades que necesitas realizar en tu turno diario.

En cualquier caso, lo importante siempre será que durante estos 21 días de autocuración Reiki mantengas estos hábitos y la disciplina para practicar autoreiki a diario.

Recuerda que el objetivo es purificar por completo tu cuerpo, proceso en el que la energía purificadora del Reiki puede generar en ti ciertas sensaciones o síntomas durante estos días.

Síntomas de autocuración de Reiki

Durante estos 21 días, como aprendiz, puede experimentar síntomas físicos y emocionales, como:

Síntomas emocionales:

• Sentimientos de ira, rabia, melancolía, tristeza y en algunos casos depresión.

Síntomas físicos:

• Gripe o fiebre.
• Sudoración excesiva.
• Fuertes dolores de cabeza.
• Trastornos del cuello y la garganta.

Hay casos en los que la persona no experimenta ninguno de estos síntomas y en muchos otros solo algunos de ellos, sobre todo en aquellos que han aprovechado este periodo para renovarse.

Lo cierto es que quien se inicia en este camino y completa por completo el período de Autocuración Reiki logra purificar tu cuerpo, mente y espíritu, necesarios para convertirse en un buen canal de energía.